miércoles, 15 de octubre de 2008
El recuerdo de Stefi
César, Cristina y Agus:
No tengo palabras para describir el dolor que siento, porque no les voy a negar la verdad, la extraño mucho a Maria. Es muy difícil describir a la perfección a una persona tan especial como ella, porque era tan linda, tan buena, siempre tenia esa sonrisita timidona y su pelo todo alborotado, siempre tan dulce, tan sincera, tan compañera, tan buena amiga. Porque ella me escuchaba siempre, y si hay algo que nos gustaba mucho a las dos era pasar horas y horas hablando, en realidad no nos dábamos cuenta era como si las horas fuesen minutos y cuando te querías dar cuenta ya habían pasado 5 o 6 horas de charla. Maria valoraba mucho todas esas pequeñas cosas, y si hay algo que siempre cuidaba era a sus amigos. Porque desde que entró en mi vida cambió demasiadas cosas, y sentí que cuando se fue, se fue un poquito de mí también, se lo llevó con ella. Sabía todo de mí, era una de mis más grandes confidentes. Era una persona tan importante en mi vida, la necesito tanto. Porque ustedes tienen que estar orgullosos, criaron a una gran persona.
No era su compañera de curso, pero cada recreo era salir y buscarla, buscarlas a ella, a Roberta, y reírnos, divertirnos. No había nada mas lindo que abrazarla, porque era tan tan chiquita, apenas la conocí yo solía llamarla "pequeña" (a ella mucho no le gustaba pero se acostumbro) y la amistad que llegamos a tener era muy fuerte. Me acuerdo que lo último que hablamos además de sus proyectos, y de los míos, fue de mi prima: Maria. Nunca ninguna de mis amigas me preguntó por ella, pero Maru estaba tan atenta a esas cosas, le conté que avanzó bastante y que por suerte le iban a dar diagnostico de que tiene capacidades especiales y que eso es muy bueno para ella que se le iban a abrir muchas puertas, Maru me sonrió y se puso muy contenta.
Yo no quiero creer, no puedo creer que no esté con nosotros, de lo único que estoy segura es que es un angelito que me cuidó (nos cuidó) estando acá y que me va a seguir cuidando (nos va a seguir cuidando) donde quiera que esté, y que ese día, cuando nos encontremos me va a abrazar bien fuerte y le voy a poder decir que me debe esa charla, que dejamos pendiente cuando se fue.
(…) Maria cambio MUCHAS cosas en mi vida, y se ganó un lugar enorme en mi corazón. No es tan fácil olvidar a una persona así. Maria va a estar siempre en mi, y nadie nadie va a ocupar su lugar.
Pueden contar conmigo para lo que necesiten, no lo duden nunca eso. Y yo voy a seguir rezando por ustedes, para que puedan seguir adelante y siendo tan fuertes como hasta ahora, y por nosotros los amigos que no podemos creer y que la extrañamos tanto.
Les dejo un abrazo grande.
Stefi
(Stefi fue compañera de María en el colegio Lasalle, en Olivos, Buenos Aires)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario